Dicho y hecho: la mudanza se hizo efectiva.
Tras dos dias de locura extrema y de inundación de objetos que ni siquiera sabía de su existencia, mi sueño se hizo realidad.
El paraíso lo he construído de puertas para adentro...pueden visitarlo. La entrada es gratuita.
La vida está llena de cuentas regresivas...la semana que viene...el mes que viene...el año que viene...Y mientras: ¿Qué?
A veces es imposible seguir el camino que desde un principio sabíamos que iban a vagar nuestros pies... Las piedras que aparecen en nuestro recorrido hacen que a veces tengamos que desviarnos para encontrarnos con elementos que en determinadas ocasiones pueden resultar extravagantes y fascinadores.
Y si no podemos obviar los contratiempos y las sorpresas...¿ Por qué el ser humano no puede evitar planear el futuro inmediato, próximo y lejano? ¿Es acaso el miedo a la incertidumbre de ese mismo futuro el que nos hace aferrarnos a propósitos que en la mayoría de las ocasiones acaban por ser violados por nosotros mismos? Necesitamos etiquetar, conocer, marcar y sobretodo: evitar la magia de dejarnos sorprender por la vida.
10 pm...frente a la catedral.
Buscamos una casa donde se celebra un acontecimiento de lo más esperado: fiesta.
Las señas para econtrar la casa son escasas...a la derecha de la catedral, una clínica de salud...nada en concreto. Y de repente vemos la luz: en uno de los porteros automáticos ponía GARCíA...éste muy francés no es, así que llamamos y bingo! Casa de Juanan a nuestra disposición y somos las primeras en llegar.
11 pm...Las cuatro españolas ya han bebido todo lo que deberían haber bebido en toooda la noche.
12 am. En 20 metros cuadrados hay más de 30 personas.
1 am. Música, alcohol,bailes y juegos con limones.
2 am: La policía!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Mais ça ce n´est pas posible... Pero sí que lo fue.
Llegas cargado una noche de invierno, dispuesto a revolver hasta el último rincón de mi existencia...Sin darme cuenta, el desorden se ha instalado entre las cuatro paredes que nos aislan del mundo.
La nieve se deshizo de los tejados mientras acariciabas mi pelo.
A la vista, todo vuelve a estar en su orden natural, pero yo voy vagando por los resquicios del recuerdo mientras intento guardar todo lo que quedó olvidado.
